La hipoglucemia cetósica sucede cuando el cuerpo tiene niveles bajos de azúcar en sangre (hipoglucemia) y niveles altos de cetonas en sangre. El hígado produce cetonas cuando no tiene suficiente insulina. Una persona que no come ni bebe durante períodos de tiempo prolongados desarrollará hipoglucemia cetósica. En los niños, esto puede ocurrir cuando tienen vómitos o diarrea. Para mantener a su hijo sano, el equipo de atención médica le recetó un medidor de azúcar en sangre para que pueda medir la glucosa de su hijo cuando sea necesario.

La hipoglucemia cetósica puede ocurrir más rápidamente en ciertos niños, como aquellos que no comen lo suficiente, están enfermos o son delgados. La hipoglucemia cetósica suele ocurrir a primera hora de la mañana después de que el niño ha pasado muchas horas sin comer durante la noche.

• Si su hijo vomita o tiene problemas para comer debido a una enfermedad, dele pequeños sorbos de una bebida con azúcar varias veces por hora. Las bebidas como la leche materna, la fórmula, el jugo, los refrescos, Gatorade® o Pedialyte® pueden ayudar a mantener el nivel de azúcar en sangre normal.
• Es importante seguir las instrucciones del profesional del cuidado de la salud sobre la frecuencia con la que debe controlar el nivel de azúcar en sangre de su hijo usando el medidor.
• Si su hijo tiene un nivel bajo de azúcar en sangre, repita la prueba de inmediato para confirmar el resultado. Luego, siga las instrucciones del profesional del cuidado de la salud para aumentar la cantidad de azúcar presente en la sangre.
• Para prevenir la hipoglucemia cetósica:
  • Dele a su hijo un refrigerio a la hora de acostarse todas las noches y algo de comer a primera hora de la mañana.
  • No permita que su hijo pase mucho tiempo sin comer. Siga las instrucciones del profesional del cuidado de la salud sobre cuánto tiempo es seguro que su hijo ayune durante la noche.

• El nivel de azúcar en sangre de su hijo es bajo incluso después de hacer el tratamiento.
• Tiene alguna pregunta sobre el cuidado de su hijo.

• el niño sigue teniendo un nivel bajo de azúcar en sangre aun después de llamar al profesional del cuidado de la salud y hacer el tratamiento recomendado.
• el niño está confundido, muy cansado o no responde

• Su hijo tiene una convulsión o se desmaya.

¿Por qué el nivel bajo de azúcar en sangre es un problema? El azúcar (glucosa) es la principal fuente de energía del cuerpo. Si el cuerpo no tiene suficiente azúcar, no puede funcionar normalmente. Tener niveles bajos de azúcar en sangre durante mucho tiempo puede causar convulsiones y daño cerebral. Es muy importante tratar el nivel bajo de azúcar en sangre de inmediato.

¿Cuáles son los síntomas de un nivel bajo de azúcar en sangre? Los síntomas de un nivel bajo de azúcar en sangre (hipoglucemia) son: dolor de cabeza, vómitos, sudoración, temblores, confusión, somnolencia, hambre, frecuencia cardíaca acelerada y mareos. Si el nivel de azúcar en sangre es muy bajo, los niños también pueden desmayarse o tener convulsiones.

¿Podría haber otra razón por la que mi hijo tiene hipoglucemia cetósica? Algunos trastornos genéticos raros pueden causar hipoglucemia cetósica. El profesional del cuidado de la salud que atiende a su hijo sabrá si su hijo tiene signos de este trastorno y decidirá si se necesitan pruebas genéticas. La mayoría de los niños con hipoglucemia cetósica no necesitan pruebas genéticas.