La balanitis ocurre en niños de todas las edades. Con la atención adecuada, mejora rápidamente y raras veces provoca problemas a largo plazo.

La balanitis es una inflamación (irritación e hinchazón) de la cabeza del pene. Es posible que su hijo tenga escozor, enrojecimiento, dolor o secreción en la punta del pene. Los niños no circuncidados también pueden tener inflamado el prepucio (en este caso, recibe el nombre de "balanopostitis").

La balanitis puede deberse a una limpieza excesiva o insuficiente de la zona, a una erupción provocada por los pañales, a los detergentes y jabones o a alergenos. También puede ser causada por hongos o infecciones bacterianas, lesiones o algunos medicamentos.

El profesional del cuidado de la salud examinó a su hijo y, si había una secreción de líquido o de pus por el pene, es posible que la haya enviado a analizar con un microscopio. Tal vez, el profesional del cuidado de la salud le haya recetado antibióticos o un medicamento antimicótico en forma de ungüento o un medicamento para tomar por boca. En algunos casos, los profesionales del cuidado de la salud recomiendan una crema con esteroides para ayudar a aliviar la picazón y la irritación. Si no hay infección, con frecuencia es posible determinar la causa y ayudar a su hijo a evitar lo que le está irritando el pene.

• Dele a su hijo los medicamentos recetados y aplíquele los ungüentos recetados según las indicaciones del profesional del cuidado de la salud.
• Para aliviar la hinchazón y las molestias, procure que su hijo se sumerja en una bañera con agua tibia sin jabón durante 10 o 20 minutos. Agregue unas cuantas cucharadas de bicarbonato de sodio, o de sal, al agua. Repita varias veces por día.
• Si coloca un paño limpio y tibio sobre la zona afectada, también puede ayudar a aliviar las molestias.
• Si su hijo tiene dolor, un medicamento puede ayudarlo:
  • En el caso de los niños menores de 6 meses, puede darles acetaminophen.
  • En el caso de los niños mayores de 6 meses, puede darles acetaminophen o ibuprofen, si el profesional del cuidado de la salud lo recomienda.
• Enséñele a su hijo a limpiarse correctamente el pene:
  • Si su hijo no está circuncidado, no debe forzar el prepucio más atrás de lo que puede llegar naturalmente. Si el prepucio no se retrae, debe empujarlo suavemente hacia atrás y limpiar y secar cuidadosamente la zona.
• Los niños sexualmente activos deben evitar tener relaciones sexuales hasta haber completado el tratamiento.
• Programe las citas de seguimiento según las indicaciones que haya recibido.

• Para ayudar a prevenir la reaparición de la balanitis, su hijo se debe lavar diariamente la zona con agua tibia y evitar productos que le irriten la piel.

Su hijo:

• No comienza a sentirse mejor en 3 a 5 días.
• Tiene fiebre.
• Comienza a sangrar por el pene.
• Mejora, pero después vuelve a presentar secreciones de pus.

Su hijo:

• No puede orinar.
• No está circuncidado y el prepucio está trabado debajo de la cabeza del pene.