El eritema nodoso es un sarpullido doloroso, con bultitos rojos o violáceos, en general, en las espinillas. Puede aparecer después de una infección o deberse a otras afecciones, pero en muchos casos, la causa es desconocida.

El eritema nodoso suele presentarse en las espinillas, pero puede aparecer en cualquier otra parte del cuerpo. Se cree que el sarpullido es una reacción exagerada del sistema inmunológico del organismo a algo, como una infección, medicamentos, enfermedades u hormonas. En muchos casos, las causas son desconocidas.

Algunos niños con eritema nodoso sienten un malestar general y pueden presentar fiebre, dolor en las articulaciones y los músculos, y/o inflamación en la zona afectada.

El eritema nodoso comienza con la aparición de nódulos calientes, rojos y dolorosos que pueden ponerse violáceos y después convertirse en manchas marrones. Pueden verse como moretones. La erupción cutánea suele desaparecer dentro de las 2 a 8 semanas. La piel afectada puede verse más oscura durante algunos meses, pero no quedarán cicatrices.

En la mayoría de los casos, el eritema nodoso desaparece por sí solo con el tiempo. Hasta que esto ocurra, el tratamiento puede ayudar a aliviar los síntomas. Si se conocen las causas, el profesional del cuidado de la salud también le dará un tratamiento para la afección de fondo.

• Si el profesional del cuidado de la salud le recomienda un antiinflamatorio no esteroide (AINES) u otro medicamento para ayudar a aliviar el dolor y la inflamación, debe dársela según las indicaciones.
• Para reducir la inflamación, eleve la zona afectada.
• Para ayudar a aliviar el malestar, coloque un paño frío y húmedo en la zona.
• Asegúrese de que su hijo haga reposo y limite su actividad hasta sentirse mejor. Esto puede ayudar a prevenir la reaparición de la erupción.
• Siga las instrucciones del profesional del cuidado de la salud para el tratamiento de cualquier infección o afección de fondo.

• Si la erupción cutánea fue provocada por un medicamento, su hijo no debe volver a tomarla. Hable con su profesional del cuidado de la salud acerca de otros medicamentos que pueda utilizar.

Su hijo:

• Manifiesta nuevos síntomas.
• Tiene un sarpullido que no mejora después de varias semanas.
• Tiene un sarpullido que mejora y después vuelve a aparecer.
• Tiene dificultad para caminar por el dolor.